Por una vez me gustaría mirar al cielo sin sentir que algo va mal. Caminar sin mirar al suelo, con la cabeza agachada. Sé que lo que he quemado a lo largo del camino me ha dejado éstas cicatrices que nunca se irán.
Me gustaría sonreir, hasta no poder más. Sueño con volar, tan rápido y tan alto hasta llegar a las estrellas. Sueño con ser feliz cada minuto del día. Sueño con encontrar a ese príncipe azul que hará que todas mis preocupaciones vuelen lejos, en direcciones opuestas.
Solo soy una chica intentando encontrar su lugar en el mundo. Atada en una sonrisa, pero dejándose hundir. Sé que no soy perfecta, pero seguramente sí lo sea de una forma inusual. Voy a volver a caer, porque eso es algo irremediable, pero sabré que valdrá la pena si luego aprendo como levantarme.
