No son sueños rotos... Es mucho más que eso.

Siento que ya no pertenezco aquí. Siento que cada minuto que he pasado dentro son un recuerdo fugaz que sobrepasará el cielo y se esfumará. Formando parte de mis recuerdos. Sabiendo que nadie se lamentará de mi huída.
Hace tiempo que dejé de preocuparme por las personas que me rompieron el corazón y empezar a preocuparme por mí.
Tengo demasiado miedo por lo que pueda pasarme fuera. Pero tengo que cerrar los ojos, andar, caer, levantarme, pedir ayuda y seguir adelante.
Ya puedo decir que me quité la venda.
Y pensar en el tiempo que he perdido con los ojos tapados, perdida, donde solo me orientaba por una voz solitaria. Chocando contra un muro demasiado alto, y sin poder dar marcha atrás.
No son sueños rotos... Es mucho más que eso.
Ahora solo me queda disfrutar el tiempo que me queda, sin olvidar cada detalle que me ha acogido aquí dentro. Sin olvidar cada persona que ha estado a mi lado todo este tiempo. A esas personas solo puedo decirles una cosa. GRACIAS.

¿Es tan malo tener miedo?

Me gustaría desaparecer. Irme a algún sitio lejos, muy lejos. Lo suficiente para que no me encuentren.
Quiero volver al pasado y rectificar todos los errores cometidos en mi vida.
Cada mañana camino sin fuerzas...
Si pudiera volver atrás lo haría... Y ahora tengo que intentar retroceder. Sé que hay un modo, así que prometo, que después de un tiempo, cueste lo que me cueste, volveré a ser la que era. Pero ahora, por favor, déjame. Déjame llorar, déjame gritar y deja que me desahogue...
Tendría que poner lo más valioso de mi vida en juego...
Por eso me pregunto... ¿Es tan malo tener miedo?
He aguantado lo inaguantable, he perdonado lo imperdonable y no voy a dejar que puedan conmigo.
Tal vez no sea demasiado tarde...

... Lo sabré ...

 

No quiero una vida de color rosa. Temo vivir una vida de color negro.
Algunos dicen que no entienden por qué me empeño en ser normal, si he nacido para brillar.
Me encanta sentarme en la orilla del mar, y respirar. Mirar el horizonte y pensar... ¿Qué es mi vida? Es un trozo de cielo que no sé aprovechar.
Me encanta observar y recordar mi pasado... Mis miedos, mis alegrías, mi forma de caminar, sin temor de caer al vacío. ¿Qué soy ahora?
Me encanta diseñar mi mañana. Sabiendo que no va a ocurrir practicamente nada de lo que imagine ahora.
Dicen que los sueños son visiones del futuro. Pero debe ser un futuro muy lejano. Imposible de soñar.
Sé que alguna mañana, me levantaré con la fuerza necesaria y sabré cual es mi misión en este mundo.
Hasta entonces... Seguiré escribiendo a este vacío cósmico. Hasta pronto vacío.